No tengo ni cianuro, no me corto muy profundo porque me duele y precisamente lo que quiero es no sufrir más hay un infierno en mi cabeza. Quisiera que parara que alguien lo hiciera por mi, dispararme o lo que fuera. Hace mucho no pasa nada bueno. Si uno mira lo que hace, y no piensa es es lo que haría si fuera el último día de su vida, por muchos días, tiene que cambiar lo que hace, pero si usted mira su vida y dice ojalá hoy se acabar mi vida y no tuviera que pensar más, que rogar más, que atormentarme más, realmente debería acabar con su vida. Pero no tengo las bolas, crecí en un cuerpo de mujer que realmente nunca me gustó. Sabiendo lo inútil que es un cierre en un pantalón de mujer, sigo vistiéndome traatando de imitar al hombre, nos vemos ridículas pero no tanto como en faldas.
Marihuana, sexo… no son tan buenos en todo caso. Compañía, amor, lo son todo y no tengo nada, nunca me interesaron porque son tan buenos pero a diferencia de mis compañeros de vida, no se pueden comprar, además duelen; la soledad, el engaño, el desamor y esas cosas que traen consigo.
“Eres muy inteligente, busca una forma rápida y sin dolor” no es lo que queres escuchar cuando notan el sufrimiento en tu voz. ”Pero, de donde vas a sacar una pistola” es más adecuado. Amiga, no sé, pero quisiera que fuera otra persona la que apretara el gatillo. Evito atentar contra la vida de un animal, es malo para mi Karma, y como por esta no hay nada que hacer es momento de pensar en mi próxima vida, tal vez por eso me volví compasiva con los insectos, de pronto esa es la nueva casa de mi alma para purgar las cucarachas, las mentiras, los atentados fallidos contra mi misma.
Escribir no ayuda esta vez a ver las cosas más claras mi cabeza es un puto infierno y no parezco poder calmarme, pero voy a tomar una pausa y fumar… dicen que ayuda, mientras recuerdo donde dejé los cigarrillos veo un plato de navidad que debería ir en mi cabeza, soy tan mala en todo que temo no darmedonde es y quedar viva… Viva y más dañada, por eso también quisiera que lo hiciera alguien más. La manera más poetica sería en un accidente automovilístico o aéreo, tratando de escapar de la cotidianidad que ofrece el pueblo de vomito donde me tocó nacer, en cuya sala de espera alguien se cagó ayer. ¿Y los restos? “Quedaron en la mierda” Entiende? Justo para donde me mandó papi.
Pausa, yo soy un rebelde con causa (… ) lo que necesito es algo con filo. Mis heridas son tan superficiales que ya cicatrizaron. Sólo me esfuerzo por ser buena en lo que escogí para mi vida, pero si no va a ser, cualquiera de los caminos me llevan al mismo sitio mediocridad-muerte juntas, porque ni eso lo puedo hacer bien. No es la primera, ni la segunda, ni la tercera vez que quiero matarme, no es ni la cuarta, todas las aspirinas de mi casa me pusieron a cagar, el kumis con el veneno fue difícil de tragar pero supongo que las bacterias contrarestaron el efecto, el veneno se dedico a acabar con ellas y no conmigo. No es la quinta vez, pero no puedo recordar cuantas veces he tenido la idea en mi cabeza. Conozco los daños del cigarrillo y fumo, supongo que la idea nunca se ha ido.
Quisiera salvarme, pero no puedo hacerlo sola y nadie lo va a hacer por mi, del cielo solo cae mierda, y ya no me apasiona nada, ni el medio ambiente ni la sociedad, me rendí con ellos. Por donde lo mire YO no quiero vivir, lo juro.
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